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La palabra ‘mí‘, con tilde diacrítica, existe en nuestra lengua al ser reconocida por la Real Academia Española (RAE) como un pronombre personal que siempre va después de una preposición (para, contra, a, de, sin, etc).Ejemplos de su uso: A mí no me gustan los helados. Para mí una Coca-Cola, por favor. ¿Acaso están todos contra mí?
Los niños se rieron de mí en la escuela. Los padres se sentaron para la reunión de la escuela. Los payasos se irán de ese circo. Los peregrinos llegaron a la catedral y se arrodillaron en súplica. Mejor será que se estacionen los autos. Mi hermana se maquilla. Mi madre se esforzó mucho durante toda su vida. Mi perro se comió toda su comida.
Sí puede ser una afirmación, un pronombre personal, o un sustantivo equivalente a ‘consentimiento’ o ‘permiso’. Mientras que si, por su parte, es una conjunción empleada para denotar condición o suposición, así como también para nombrar una nota musical.. Lo que diferencia a ambas palabra es una tilde, conocida como tilde diacrítica, que es aquella empleada para dar a una ...
Definición RAE de «tilde» según el Diccionario panhispánico de dudas: 3.3. Tilde diacrítica en el adverbio solo. La palabra solo, tanto cuando es adverbio y equivale a solamente (Solo le interesa el deporte) como cuando es adjetivo (Está muy solo), no debe llevar tilde según las reglas generales de acentuación por tratarse de una voz llana terminada en vocal (→ 1.2.2).
17 de jul. de 2024 · Tú/Mí: llevan acento si son pronombres personales. Tú madrugas todos los días. A mí me gustan todas las frutas; SE/SÉ, o las dudas del saber. Se: cuando es pronombre reflexivo va sin tilde. Se fue rápido. Sé: Se acentúa como forma del verbo ser o saber. No sé tu nombre.
A mí me dijo Matías que sí quería venir; Ante el altar, María dio el sí para su prometido; Creo que sí iré este verano a Orlando; Dime que sí y lo haré; El empleo en sí mismo es sencillo, lo que tiene de desfavorable es el horario; Ella se corta el cabello a sí misma; Ellos dijeron que sí querían participar del campeonato
Mí (con tilde diacrítica) → pronombre personal: ¡Arrodíllate ante mí, vasallo!; Pues a m í qué me impor ta; No puedes vivir sin mí y lo sabes; Esta llamada es para mí; A mí no me hace gracia eso que dices; Lo tengo delante de mí ¡Pues a mí me gusta mucho!; No te olvides de mí como siempre ¿Este regalo es para mí?; No quepo de gozo en mí; Mi (sin tilde diacrítica) → nos ...
