Search results
1. Entender la situación. El primer paso para aceptar que no te quiere es entender en qué situación nos encontramos. Puede que acabemos de romper con nuestra pareja, que una persona de la que estamos enamorados nos haya rechazado o que un amigo nos haya dejado de hablar por cualquier motivo…
2 de oct. de 2023 · La limerencia se caracteriza por dar prioridad a quedar con esa persona por delante de cualquier plan, obsesionarse con sus redes sociales, imaginar demasiados escenarios ficticios junto a esa persona, tergiversar un gesto de atención por uno de amor, y sentirse muy triste si esa persona no nos corresponde tanto como nosotros la deseamos.
15 de nov. de 2022 · 5 minutos. En proceso de revisión. Luchar por el amor de alguien que no nos ama tiene un nombre: autodestrucción. Pongamos los esfuerzos en el propio bienestar emocional. Querido “yo”, dejemos de luchar por alguien que no nos quiere. Avancemos para no lastimarnos más por un amor con demasiadas contraindicaciones.
4 de oct. de 2023 · 1. Aceptar la realidad: Reconoce que la persona no está interesada en ti y que seguir buscándola no te beneficiará emocionalmente. Es normal sentir tristeza, decepción o incluso enfado, pero aceptar la situación te permitirá avanzar. 2. Evaluar tus propias necesidades: Reflexiona sobre por qué estás buscando a alguien que no muestra interés en ti.
17 de may. de 2019 · Sé que ya no me quiere, ahora ¿qué hago? Si quieres asumir que alguien no te quiere te recomendamos que, antes que nada, tengas en cuenta estos 3 consejos esenciales: Las personas somos diferentes. Cuando una persona se ha quedado estancada, siente ese sabor amargo que produce la insatisfacción y la decepción hacia uno mismo.
6 de abr. de 2022 · Suplicar, rogar o insistir no hará que la otra persona te quiera, pero sí debilitará profundamente tu autoestima. Acepta que los sentimientos no se pueden controlar. ¿Sientes ira o rabia hacia la otra persona por no corresponderte? Esto es natural hasta cierto punto, pero no es lógico.
Digamos un pequeño trabalenguas: no es que uno no quiera quererse, sino que no encuentra el modo de hacerlo. La falta de aprecio por uno mismo no nace de la nada. Detrás de ello frecuentemente hay toda una historia de desafectos, a veces de abandonos o agresiones violentas.
