Search results
17 de mar. de 2011 · La ciencia es la verdadera gloria, mientras que la religión es una gloria fabricada. La noción religiosa de alma y espíritu, o de vida enterna y juicio final no son más que una «fantasía». Me siento feliz por las personas que adoptan ese falso confort, pero hay que darse cuenta de que es un bienestar ficticio. Peter Atkins, profesor de ...
Para Jesús, modelo supremo de humanidad, la verdadera gloria consiste en la Cruz, en la aceptación viril y seria del holocausto llevado hasta el último punto. Redacción (04/02/2024, Gaudium Press) Las deformaciones introducidas en la mentalidad moderna por la influencia del cine de Hollywood –marcado por el invariable final feliz, ese ...
La poeta Gloria Fuertes menciona varios elementos de la Navidad en su poema "Navidad". Entre ellos se encuentran: 1. El árbol de Navidad: En el poema, Fuertes menciona que "Ya está aquí el árbol de la Navidad", haciendo referencia al tradicional árbol adornado que se utiliza durante esta festividad. 2.
26 de mar. de 2024 · Pero la verdadera gloria de la Iglesia y del fiel resulta del sufrimiento y de la lucha. Una lucha árida, sin belleza sensible, ni poesía definible. Una lucha en la que a veces se avanza en la noche del anonimato, en el lodo del desinterés o de la incomprensión, bajo las tormentas y el bombardeo desatado por las fuerzas conjugadas del ...
Años después de haber sobrevivido al atroz acoso de varios compañeros de escuela, una mujer arma un elaborado plan de venganza para que caigan uno por uno. Ve tráileres y más.
14. «La gloria sigue a la virtud como si fuera su sombra». Marco Tulio Cicerón. 15. «La verdadera gloria consiste en hacer lo que merece ser escrito, en escribir lo que merece ser leído y en vivir de tal manera que hagamos el mundo más feliz y mejor para nuestro vivir en él». Plinio el Viejo.
La adoración como expresión de gratitud. La verdadera adoración es una expresión de gratitud hacia Dios por Su amor, gracia y misericordia. Salmo 100:4 nos insta a entrar en Sus atrios con gratitud y alabanza. La adoración sincera reconoce que todo lo que tenemos y somos proviene de Dios, y es una respuesta a Su generosidad y cuidado en nuestras vidas.
