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  1. No es que Dios esté buscando la vida de Moisés, como hizo Faraón. Hay dos temas clave. Primero, está el asunto de los hijos. El “primogénito” de Faraón (Éx 4:23) y el hijo de Moisés (quizás su primogénito) están involucrados en una contienda crucial que involucra el llamado de Dios a Israel, su “primogénito” (Éx 4:22).

  2. Éxodo 4:25. Cuando Dios amenaza con la muerte de sus siervos, a veces les permite escapar. Es deber de la esposa salvar a su esposo de morir a manos de Dios. Dios soporta largamente las negligencias pecaminosas de su pueblo, pero no con aprobación. Es peligroso descuidar un sacramento inicial ordenado por Dios; es seguro observarlo. Éxodo 4:26.

  3. Vamos a dar lectura al pasaje bíblico en Éxodo 4:24-26. La Biblia dice: Y aconteció en el camino, que en una posada Jehová le salió al encuentro, y quiso matarlo. Entonces Séfora tomó un pedernal afilado y cortó el prepucio de su hijo, y lo echó a sus pies, diciendo: A la verdad tú me eres un esposo de sangre. Así le dejó luego ir.

  4. 8 de dic. de 2017 · Entonces Séfora tomó un pedernal afilado, cortó el prepucio de su hijo y lo echó a los pies de Moisés, diciendo: –A la verdad, tú eres mi esposo de sangre. Luego Jehová lo dejó ir. Ella había dicho: «Esposo de sangre», a causa de la circuncisión.” (Éxodo 4:20, 24-26).

  5. Éxodo 4:24-2. Un pequeño deber descuidado puede frustrar todo el propósito de una vida. Para un israelita, la circuncisión de sus hijos varones en el octavo día era un deber práctico, basado en un precepto positivo, que era inequívoco y perentorio. (Ver Génesis 17:10-1 .)

  6. Contexto y significado del versículo Éxodo 4:24. El libro de Éxodo relata la historia de cómo Moisés, guiado por Dios, lideró al pueblo de Israel en su liberación de la esclavitud en Egipto. En Éxodo 4:24, se cuenta un episodio que parece bastante extraño y difícil de entender.

  7. Éxodo 4:(24-26) La vida de Moisés es perdonada en el camino. Y aconteció en el camino, que en una posada Jehová le salió al encuentro, y quiso matarlo. Entonces Séfora tomó un pedernal afilado y cortó el prepucio de su hijo, y lo echó a sus pies, diciendo: A la verdad tú me eres un esposo de sangre.