Yahoo España Búsqueda web

Search results

  1. Y él se levantó, fue a Elí y dijo: Aquí estoy, pues me llamaste. Entonces Elí comprendió que el Señor estaba llamando al muchacho. 9 Y Elí dijo a Samuel: Ve y acuéstate, y[ f] si Él te llama, dirás: «Habla, Señor, que tu siervo escucha». Y Samuel fue y se acostó en su aposento[ g].

  2. Cuando Samuel oraba por el pueblo, Dios siempre lo escuchaba. El pecado nos separa de Dios. Si no estamos dispuestos a humillarnos bajo Su voluntad, ni a obedecer y acabar con el poder del pecado en nuestras vidas, entonces estaremos aislados de la gracia de Dios, así como Elí.

  3. Te ruego que no me la encubras; así te haga Dios y aun te añada, si me encubrieres palabra de todo lo que habló contigo. 18 Y Samuel se lo manifestó todo, sin encubrirle nada. Entonces él dijo: Jehová es; haga lo que bien le pareciere.

  4. Samuel le dijo a Elí todo lo que Dios le había dicho, y él siguió siendo fiel a Dios, incluso si los mensajes que tenía que llevar a la gente no fueran mensajes agradables. Debido a su fidelidad, Samuel se convirtió en una persona importante para Dios, en el liderazgo del pueblo de Dios.

  5. 1 Samuel 3 narra el llamado de Samuel a ser un profeta de Dios. Dios habló con Samuel por primera vez cuando todavía era un niño que servía en el Templo de Dios. El capítulo muestra la importancia de escuchar la voz de Dios y obedecerla.

  6. Entonces el Señor se detuvo junto a él, y lo llamó como las otras veces: «¡Samuel, Samuel!» Y Samuel respondió: «Habla, Señor, que tu siervo escucha.»

  7. 1 Samuel 3 narra el llamado de Samuel a ser un profeta de Dios. Dios habló con Samuel por primera vez cuando todavía era un niño que servía en el Templo de Dios. El capítulo muestra la importancia de escuchar la voz de Dios y obedecerla.